Ø Tlapacoyenses
no se explican que pasa en esta dependencia de vialidad.
Por.-
Miguel Ángel González
Tlapacoyan
Ver.- La delegación de Tránsito y Vialidad numero 23 de esta ciudad tiene aproximadamente 4 años
de carecer de personal operativo y todo este tiempo se cuenta con un delegado,
un comandante y un auxiliar, para una población que se encuentra aglomerada de
vehículos y es de entenderse que este personal no dan abasto a nada solo se
abocan a hacer un esfuerzo por controlar los problemas viales diariamente.
Conductores
en general comentan que nadie se explica porque esta central de tránsito y
vialidad se encuentra abandonada por el gobierno del estado a través de la
dirección general de Transito y Seguridad Vial Estatal, hace tiempo que nadie
voltea para Tlapacoyan y autoricen enviar
personal uniformado capacitado para frenar los embotellamientos que
diariamente se vive en este municipio.
Es
urgente que Tlapacoyan sea una ciudad tomada en cuenta por las autoridades
Estatales y vean la problemática de vialidad que se vive actualmente en este
municipio y todo por el olvido de quienes deben poner orden a este tipo de
problemas, porque la verdad en este municipio y en cuestión del tema de la
vialidad domina la ley del más fuerte.
Tlapacoyan
no cuenta con sistema de semaforizacion que venga a controlar la circulación y
el respeto a los peatones, los ciudadanos transitan diariamente bajo la
bendición de dios debido que conductores de vehículos, motociclistas y
bicicleteros toman las calles en sentido contrario sin importar que lleguen a
ocasionar algún accidente en los peatones.
Se
Espera que en pleno siglo XXI las autoridades estatales de vialidad realmente
hagan algo favorable por Tlapacoyan debido que los pobladores merecen respeto
por los conductores en general quienes hacen de las suyas al revés y al derecho
al saber que en el municipio no hay una autoridad capaz de frenar este desastre
vial.
Cabe
destacar que el personal existente realizan un mega esfuerzo por tratar de
controlar los problemas viales que hay en el centro de Tlapacoyan pero la
realidad es que no logran mucho ante conductores que no respetan a nadie.